Lugar:

Comunidad La Esperanza, Municipio de Huizúcar, Departamento de La Libertad, El Salvador.

Población participante:

En la comunidad La Esperanza habitan 89 familias, las cuales se consideran beneficiarias directas de las acciones del proyecto respecto a los procesos de sensibilización y acciones de protección de los recursos hídricos. Del total de personas en estas familias, 244 son hombres y 232 son mujeres.

Contexto:

La precaria situación de El Salvador en cuanto al acceso de agua potable y saneamiento básico, es uno de los problemas sociales críticos que padece la población salvadoreña, principalmente el sector rural, donde vive el 50% de la misma.

La población de La Esperanza no cuenta de manera generalizada con adecuados sistemas de saneamiento básico. La deposición de excretas es a través de letrinas de hoyo (59 familias) y al menos 19 familias no tienen ningún tipo de letrinas por lo que hacen sus necesidades al aire libre. El riesgo de contaminación bacteriológica de los mantos acuíferos es persistente y afecta la salubridad de la zona y el estado de salud general de la población.

Respecto a las aguas derivadas del uso doméstico, las familias las vierten directamente en los lotes de las viviendas y a las calles, provocando encharcamientos y la proliferación de vectores (mosquitos) transmisores de enfermedades recurrentes (dengue, malaria).

Breve descripción del proyecto:

El proyecto estaba encaminado a mejorar la calidad de vida de la comunidad La Esperanza a través de:

• Mejorar el saneamiento básico, contribuyendo a la disminución de enfermedades gastrointestinales y eliminación de insectos potenciales transmisores de enfermedades (dengue, malaria…).
  
• La implementación de pequeños sistemas de producción reutilizando las aguas domésticas que serían tratadas mediante biofiltros. La posibilidad de disponer de sistemas de micro riego contribuiría a diversificar la dieta alimenticia de las familias de la comunidad La Esperanza.
  
• Apoyo a los procesos organizativos y educativos encaminados a fortalecer las capacidades a nivel comunal. La comunidad La Esperanza recibió información y capacitación para un adecuado manejo de las tecnologías promovidas y la creación de una conciencia encaminada a la protección del entorno (suelo, fauna, flora y agua) y a ser gestores de sus procesos de desarrollo.

Resultados:

Se esperaba construir 45 letrinas aboneras, pero finalmente se construyeron 54, nueve más de las previstas. Se han construido 47 biofiltros de los 45 que se tenían previstos para el tratamiento de las aguas grises y se ha capacitado a la población en su utilización. También 30 familias cuentan ahora con su parcela hortícola con un sistema de micro riego produciendo alimentos para auto consumo.

En la parte de saneamiento básico, la comunidad La Esperanza ha logrado mejorar la calidad de vida de las familias de esta comunidad, logrando reducir la contaminación de los mantos acuíferos, reducir los charcos en patios y calles de la comunidad y mejorar las prácticas hidrosanitarias. Con el proyecto se ha logrado fomentar la economía local, y las capacidades, con la contratación de personal local.

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