Ethical Performance, respetada publicación británica, nos informaba estos días de la publicación del primer informe de sostenibilidad de Co-operative Financial Services (CFS), compañía del grupo de The Co-operative Bank.
La principal novedad ofrecida por el informe radica en que da cuenta, por vez primera, de las actividades de lobby político de CFS. El documento también ofrece detalles acerca del ejercicio de los derechos de voto de CFS en las juntas generales de accionistas de las 8000 compañías en las que CFS invierte. CFS sigue así las recomendaciones contenidas en las normas de gobierno corporativo más sofisticadas. Éstas piden, entre otros asuntos, que los gestores de activos hagan público el sentido de sus votos en las juntas generales de las compañías en cuyo capital participan.
Escrito por Ramón Pueyo